Esta es la breve crónica de un partido en el que el equipo contrario fue muy superior al
nuestro en intensidad, asociación entre jugadores y finalización en portería.
Escasos de efectivos, empezamos con sólo tres jugadores de pista, pero un buen gesto
de Fidel (entrenador de StickyPatines), que decidió salir también con tres jugadores
hasta que llegó Jaime, hizo que aquello no nos penalizara demasiado. Por supuesto, le
agradecí el detalle en su momento, pero me parece justo hacerlo de nuevo aquí y ahora.
El sorteo para la portería determinó que Pablo se ocupara de las guardas, algo que hizo
notablemente, deteniendo muchas más bolas de las que acabaron en nuestras redes. Que
no fueron pocas. Con Ale enfermo (¡recupérate pronto!), tampoco hubo opción de dar
cambios.
En fin, poco más. Sólo que seguiremos intentándolo.
Fern.